El colectivo de la Tercera Edad en España afronta las próximas elecciones al Parlamento Europeo con poca información y la certeza de no sentirse identificado con los partidos. Con una Europa cada vez más envejecida y la previsión de que el 37% de la población será mayor en 2051, los agentes políticos siguen todavía sin escucharles.

Víctor M. Romero

­­Las elecciones europeas del próximo 25 de mayo van a ser especiales para un colectivo de votantes en particular: el de los mayores. El hecho de ser una convocatoria marcada por la crisis y el empleo no resta importancia a la realidad de que Europa es cada vez más vieja y las políticas que afectan a este colectivo son uno de los retos más importantes que afronta el siglo XXI. La asunción por parte de la UE de este envejecimiento ha provocado un cambio en ciertas iniciativas políticas, ahora más encaminadas a favorecer a este colectivo. Sin embargo, ¿los agentes políticos atienden las necesidades de nuestros mayores o toman iniciativas para ganar un puñado de votos?

“Los partidos políticos no tienen en cuenta en sus políticas a las personas mayores. Un ejemplo claro es la pérdida de poder adquisitivo de las pensiones que, sin embargo, venden como un aumento de las mismas. La eliminación de numerosos fármacos de la lista de los que subvenciona la Seguridad Social, así como el copago de los mismos ha provocado que muchos pacientes están dejando tratamientos necesarios para su salud”, lamenta, así de contundente, la presidenta de la Asociación de Alumnos de la Universidad Permanente de Alicante (UPUA), María Luisa Mataix.

Además de esos factores, prosigue María Luisa Mataix, “el abandono de la Ley de Dependencia ha dado lugar a que muchos dependientes que cumplían con los requisitos para tener una ayuda hayan muerto antes de recibirlas y otros muchos no las reciben”.

Estas declaraciones confirman que una de las inquietudes que más preocupan a los mayores es la salud, por encima del económico y social. Otros aspectos que también tienen en vela a los mayores son el acceso a la asistencia sanitaria, la escasez de atención, la vida independiente y la participación activa en la sociedad. Esta conclusión también la recoge el documento titulado Propuestas para el desarrollo de las orientaciones del Consejo de la Unión Europea relativas a las personas mayores que, liderado por el Imserso, refleja sus preocupaciones.

La escucha política…

En las reuniones donde se elaboró este documento participó la presidenta de la Asociación de Alumnos de la UPUA y las conclusiones sacadas con respecto a la implicación de los partidos políticos no han sido positivas. “A la mayoría de las preguntas que se les hicieron a los dos representantes políticos, parlamentaria del PP y otro de UPyD, sobre ayudas, sólo dieron contestaciones ambiguas a preguntas sobre políticas para los mayores”, recuerda María Luisa Mataix, al tiempo que lamenta que los políticos “no supieron responder de una forma constructiva cuando los representantes de los sindicatos les hicieron críticas”.

Las palabras de María Luisa Mataix revelan un distanciamiento entre lo que dicen los políticos (ver las propuestas de los partidos políticos incluidas en este reportaje sobre el colectivo de los mayores) y lo que ellos demandan. La sintonía de un colectivo que en España representa en la actualidad al 17% de la población y que en el año 2051 se incrementará hasta el 37% con los políticos está muy alejada.

En opinión de María Luisa Mataix, los políticos convierten a los mayores en “víctimas culpables por el gasto que representan los jubilados, por el pago de las pensiones y el uso de la Seguridad Social”. Ante esta situación, según Mataix, “no creo que ningún mayor se sienta representado” y los políticos no tienen en cuenta “todo lo que los mayores colaboramos con la sociedad, consumiendo, no solo medicamentos, ni las ayudas a las familias, económica y laboralmente (ya que muchos abuelos se hacen cargo de los nietos, incluso de las labores domesticas)”.

¿Activos y participativos?

La importancia de los mayores para la sociedad es innegable y su participación en política y en la toma de decisiones deberían de ser una constante para transmitir su experiencia. ¿Son realmente activos nuestros mayores? María Luisa Mataix hace una distinción entre la participación en unas elecciones y la participación activa en política.

“En cuanto a las elecciones, tengo claro que somos el segmento de la población que más participa en las elecciones. Pero la participación activa es escasa debido a que las personas más mayores no participan y a que los partidos no cuentan en sus aparatos con secciones de mayores, cosa por otro lado ilógica, si quieren atraer el voto de esas personas para conocer de primera mano cuáles son nuestras necesidades”.

Es precisamente en cuanto al desarrollo de la sociedad donde los mayores quieren, según el documento liderado por el Imserso, provocar un cambio en favor de su participación. Al respecto, el estudio recoge que una de las demandas más importantes es la creación de “mejores oportunidades para que los mayores se mantengan activos y participen en la sociedad junto con las generaciones más jóvenes”.

Una de las iniciativas tomadas desde la UE para conseguir alguno de estos objetivos ha sido la creación de la Asociación Europea para la Innovación sobre un Envejecimiento Activo y Saludable, un programa piloto que quiere aumentar en dos años la esperanza de vida con buena salud de los europeos de aquí a 2020. Los resultados aún están por ver…

Adaptar la formación y educación

Su educación y formación ya juega un papel fundamental en el presente y en el futuro de Europa. Concha Bru, directora de la UPUA, considera que las políticas de la UE, desde hace varios años, primero con el Plan de Aprendizaje Permanente (PAP) y ahora con el nuevo programa el nuevo programa Erasmus+ en el ámbito de la educación y la formación (2014-2020) enfatizan la necesidad de contribuir a la creación de una sociedad del conocimiento abarcando todas las edades.

Sin embargo, existe un problema. “Todos estos planes insisten en la necesidad de formación de personas adultas y en la formación continua y aprendizaje permanente a lo largo de la vida, pero vemos que a menudo esto sufre una focalización posterior en programas y proyectos centrados en la empleabilidad, lo que significa que personas jubiladas y muy mayores no encuentran respuestas adecuadas mediante estas políticas y propuestas”.

Debido a ello, Concha Bru se hace la pregunta de si no es un poco absurdo pedir que los mayores, de 70 a 75 años, sigan formándose para un empleo. “Se supone que en un estado de derecho, a esas edades un ciudadano medio debe haber pasado a una situación de disfrute de la jubilación y donde la formación permanente y a lo largo de la vida le sirva para su desarrollo personal, promover la autonomía y retrasar la dependencia cuanto más años mejor y sobre todo gestionar su propio envejecimiento activo, de acuerdo a sus necesidades y entorno familiar y social”.

En este sentido, desde los programas universitarios y de formación especializada de mayores reclaman ayudas para la formación en edades de jubilación y que cada persona escoja si quiere seguir trabajando o contribuir con su conocimiento, experiencia y envejecimiento activo a crear una sociedad más inclusiva y sostenible.

En definitiva, el desarrollo de políticas que “se centren en el individuo adulto-mayor como persona y que promuevan su desarrollo cultural y personal, no estrictamente productivo”, enfatiza Concha Bru. De este modo, este colectivo será capaz de aportar sus experiencias y conocimiento a la sociedad en un contexto intergeneracional.

PROPUESTAS DE LOS PRINCIPALES PARTIDOS EN SU PROGRAMA

PP

• Impulsaremos y aplicaremos programas específicos sobre envejecimiento activo, capaces de promocionar y trasladar una imagen positiva de las personas mayores.
• Mejoraremos la calidad de vida de las personas a medida que envejecen, ampliando y favoreciendo oportunidades de toda índole que les permitan desarrollar una vida saludable, participativa y segura.
• Perseguiremos las malas prácticas y las situaciones de abuso a la confianza debida a las personas mayores en el ámbito familiar, comercial, financiero y de los servicios asistenciales.
• Respaldaremos las iniciativas comunitarias que favorezcan la coordinación de los sistemas de Seguridad Social y transferencia de los derechos de pensión.
• Apoyaremos las medidas que ayuden a sensibilizar acerca de la contribución que las personas mayores aportan a la sociedad.
• Fomentaremos líneas de actuación para la atención integral a las personas que requieren cuidados de larga duración, mejorando la calidad de vida de las personas mayores y sus familias.
• Promoveremos nuevos cauces de participación y consulta de las personas mayores en las instituciones públicas.

PSOE

• Desde el PSOE nos informaron, tras no conseguir de ningún modo el programa electoral, de que “el Programa marco o referencia electoral de los socialistas para las Elecciones Europeas lo constituyen el Manifiesto de Roma, la declaración política y las propuestas socialistas que puedes encontrar en la página web, europeas2014.psoe.es. “.
• En las 25 propuestas no hay nada específico con respecto a la Tercera Edad.
• Manifesto de Roma: “Lucharemos por una Europa que no deje a nadie atrás. Unos ingresos dignos, la calidad y accesibilidad de la educación, de la vivienda (incluida una vivienda social), de la sanidad y del cuidado de la infancia y las personas mayores, así como unas pensiones adecuadas son componentes cruciales de nuestras sociedades”.
• Declaración Política: “Trabajaremos en políticas dirigidas a combatir la discriminación y la desigualdad de trato en el acceso y permanencia en el empleo y en todos los ámbitos de la sociedad, de aquellos grupos que pueden sufrir discriminación por motivos de sexo, etnia, orientación sexual, discapacidad, edad y cualquier otra circunstancia personal o social”.

UPYD

• Combatir contra la violencia de género, y a favor de los sectores más desprotegidos frente a las diversas formas de violencia: niños, adolescentes, mayores, minorías étnicas, mujeres y personas con discapacidad.
• La población de la UE envejece a un ritmo sin precedentes. Debe impulsarse una nueva cultura basada en los derechos de las personas mayores, promoviendo un cambio de mentalidad y de actitudes sociales respecto al envejecimiento. Los mayores, como las personas con discapacidad, no deben ser consideradas como meros receptores de medidas de bienestar social, sino miembros activos de la sociedad con sus propias aportaciones al interés general.
• Desarrollo, mediante iniciativas legislativas, del artículo 25 de la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE que consagra el derecho de los mayores a una vida digna e independiente, y a participar de la vida social y cultural. Impulsar el desarrollo del derecho a las prestaciones y servicios para las personas dependientes.

EU

• Aplicando el principio de precaución en el terreno de la contaminación electromagnética abogamos por que se compartan las infraestructuras de emisión, repetición y recepción armonizando normas en toda la UE para evitar los posibles efectos indeseados en la salud de las personas más sensibles, criaturas de poca edad y personas mayores.
• Desbloquear el proyecto de Directiva Marco que luchará contra la discriminación por motivos de religión, opinión, discapacidad, edad, orientación sexual o identidad de género.

Cuanta más formación los mayores se implican más

V.M. Romero

El interés y la actividad política de las personas mayores se caracteriza por registrar cuotas más bajas que la población en general, con diferencias significativas entre hombres y mujeres, ya que ellos muestran niveles más altos que ellas. Las cuotas van en disminución en función del aumento de la edad. Al respecto, María Luisa Mataix señala que de los 60 a 75 años, cuando empieza la vejez, “son más activos, lógicamente, sobre todo en las nuevas generaciones, que llegan en mejores condiciones físicas y preparación, con ganas de disfrutar de una nueva vida con más tiempo para el ocio y sin tantas responsabilidades”. De esa edad a los 85 esas personas son menos activas, aunque lleguen en buenas condiciones, ya que están centradas en el ámbito familiar.

También influye, la formación. Los mayores más preparados tienen mayores niveles de interés, al igual que las personas mayores situadas en clases sociales más altas. Por el contrario, las personas mayores católicas y las que residen en ámbitos rurales muestran menos interés político. Dentro de otras formas de participación política convencionales, como son la asistencia a manifestaciones, participación en huelgas, afiliación a un partido político o sindicato, las personas mayores tienden a participar en las dos primeras, relegando a un segundo plano una implicación más formas en partidos o sindicatos.

Víctor M. Romero

Llega unos minutos con retraso. Y es que los miércoles Josefa Mira, “Pepi” para los amigos, participa por la mañana en una tertulia en Radio San Vicente en la que transmite su experiencia a los oyentes. Por la tarde está más liada toda la semana. Lunes, miércoles y viernes tiene clases en la Universidad Permanente de la Universidad de Alicante; los martes es catequista en la Parroquia de la Inmaculada y, además, forma parte de un grupo en la Parroquia de la Pastoral de la Salud con el que acude y visita a personas que, ya por la edad o por cualquier otro motivo, no pueden ir a la iglesia.

Parece que no le queda tiempo para mucho más. Tiene la agenda realmente completa…
Es importante mantenerse ocupada y lo que yo hago son cosas que me llenan mucho. Sobre todo la actividad que hacemos con el grupo en la Parroquia de la Pastoral de la Salud. Al visitar a estas personas que están en una situación de vulnerabilidad y escuchar lo que nos tienen que decir me he dado cuenta de que todos tenemos la necesidad de hablar y de comunicarnos. Muchas veces esto es lo que quieren y me llena mucho esta actividad desde un punto de vista personal.

¿Y las clases de la Universidad Permanente?
Este año me he apuntado a dos. Uno sobre Excel y otro que se llama “Del mercado al plato”. Empecé a trabajar a los 17 años en la empresa Smurfit Kappa España de San Vicente y no puede ir a la Universidad. Cuando me jubilé a los 60 años tenía claro que quería estudiar y hacer cosas, y ya lo tenía todo preparado antes de dejar a trabajar.

¿Qué le aportan estas actividades?
Aprender, estar actualizada y, sobre todo, nuevas relaciones con los compañeros. Todos los años un grupo de unas 50 personas hacemos un viaje en el que disfrutamos y, como durante el resto del curso, intercambiamos impresiones y nuestras vivencias.

¿Qué recomendaría a las personas mayores que desconfían o no se atreven a unirse a algún grupo o estudiar?
Yo creo que no lo hacen porque no lo han probado todavía. Yo, puedo asegurar, que soy más feliz y me siento mejor con esta actividad.

¿Qué demandas tienen los mayores en su día a día?
Bueno, no sé todas, pero yo en particular creo que nos falta información o no nos llega del modo más adecuado. He intentado, por ejemplo, buscar información sobre estas elecciones europeas y he visto muy poco, siendo un evento realmente importante.

¿Qué es lo próximo que le gustaría iniciar?
Quiero hacer cosas nuevas cada día y tener la oportunidad de participar en algo que no haya hecho antes.